"Yo no tengo la culpa de tu torpeza supina.¿O es que ahora me va a tocar a mí asumir tu ingenuidad?. Lo primero que un ser humano debe aprender en la vida es a desconfiar .... desconfiar de todo. Si eso no te lo enseñaron tus nobles padres, yo, un pobre diablo venido del estiércol de la vida, ¿iba a tener que enseñártelo?.Por favor!. Tenías que haber desarrollado unas escamas de acero, es lo que hay que hacer para sobrevivir en este mundo de hienas. Cada uno debe asumir sus equivocaciones. Y desde luego, te equivocaste; asúmelo de una vez y no me tortures más.
Todo ha sido culpa tuya.¿Cómo te metiste con aquella furcia?.
Sí, estoy de acuerdo contigo en que era una diosa; su cuerpo escultural era para morirse de gozo y caer rendido a sus pies.Pero ¿creer que estaba enamorado de tí?. Qué ingenuidad!. Más que llamarte Duque de Merlot deberías haber llevado el título de Duque de los Inocentes. Tenías que estar muy necesitado, hombre. ¿Cómo creíste que te podía querer una ramera de semenjante envergadura?. Apuesto a que te decía que te amaba con locura. Es lo que dicen todas cuando quieren conseguir algo; y ella sabía que estabas forradito de joyas. Ese tipo de mujeres bailan por los diamantes como los perros por la comida.Tarde o temprano tu torpeza te iba a pasar factura. Hay que asumir las edades, mi pobre duque. Lo dice la Biblia: " Hay un momento para sembrar y otro para cosechar"... en resumen, que existe un momento para todo y a tí a no te tocaba esa escultura. Haberte buscado a alguien de tu edad .... pero las carnes viejas cuestan de masticar, ¿verdad?"
"Memorias de un sinvergüenza de siete suelas" de Angela Becerra.
¿Realmente existe un momento en la vida para cada cosa?
¿Hay un tiempo para sembrar y otro para cosechar?
¿Pasado el tiempo de la siembra ya no se puede plantar nada mas?
¿Se cosecha siempre lo que se siembra o a veces la tierra nos sorprende?
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